Series sobre "El Mensaje de la Cruz" – (14)
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Julio 29, 2007 |
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 {La Orden de Publicación}
La Crucifixión
1.La Providencia de Dios encontrada en la ropa de Jesús
2.La razón por la cual Jesús fue clavado en Sus manos y Pies y las diferencias en los escritos de los dos malhechores
3.La Providencia de Dios al no quebrar las piernas de Jesús y el significado espiritual de que Jesús haya derramado Su sangre y Su agua
La providencia de Dios encontrada en la ropa de Jesús
“Cuando los soldados hubieron crucificado a Jesús, tomaron sus vestidos… Entonces dijeron entre sí: No la partamos, sino echemos suertes sobre ella, a ver de quién será. Esto fue para que se cumpliese la Escritura, que dice: REPARTIERON ENTRE SÍ MIS VESTIDOS, Y SOBRE MI ROPA ECHARON SUERTES”. (Juan 19:23-24)
Con el propósito de salvar a toda la humanidad los pecadores, Jesús vino a este mundo, soportó severas persecuciones, fue crucificado, resucitó y ascendió al cielo. De manera que, todo aquel que crea en Jesús quien se ha convertido en nuestro Salvador, recibirá la autoridad por la cual es reconocido como hijo de Dios. Un mayor entendimiento del sufrimiento de Jesús y de la Providencia de Dios hallada en esto, también le permitirá a cada creyente una profunda comprensión del amor de Dios y a esforzarse más duramente en su vida en Cristo.
¿Por que fue Jesús humillado al punto de ser desnudado en público, y cual es la Providencia de Dios hallada en la ropa de Jesús y en Su túnica?
1.Jesús soportó la vergüenza de ser desnudado para redimir a los pecadores de su propia vergüenza.
Jesús cargó en Su espalda durante todo el camino al Gólgota la cruz en la cual iba a ser crucificado. Cuando llegó al lugar de su crucifixión, los soldados tomaron la ropa de Jesús y la túnica y Él fue colgado en la cruz completamente desnudo. Jesús el único Hijo engendrado de Dios, el Más Alto, fue forzado a soportar la humillación de ser desnudado totalmente ante meras criaturas.
¿Por que razón fue Jesús sometido a tal humillación? Él soportó la humillación y la vergüenza que nosotros íbamos a sufrir por nosotros mismos. El Jesús sin pecado fue objeto del ridículo y del desprecio que iba a ser y debería haber sido inflingido solamente sobre los pecadores.
Más sucio que la suciedad y más deshonorable que el deshonor es el pecado. Ya que mucha gente hoy en día está viviendo en medio del pecado, ellos también se están volviendo cada vez más insensibles a él. Sin embargo, así como la luz expone las cosas de la oscuridad, cuando la Palabra de Dios, quien es luz en Si mismo, brilla en nuestro corazón, todos los pecados vergonzosos dentro de nosotros son expuestos. La gente que ha sido empapada en la suciedad de este mundo y que está viviendo en pecado, no pueden atreverse a mantener su cara en alto, pues sus despreciables obras y corazones, con los cuales se presentarán ante el juicio de Dios son descubiertas en su totalidad.
Sin embargo, Jesús nos redimió de nuestros pecados y soportó por nosotros la humillación y la indignidad a favor nuestro; y todo aquel que cree esto puede ser liberado de la vergüenza que un pecador va ha soportar. De allí que, cada uno de nosotros tiene que estar agradecido con todo nuestro corazón por el amor de Nuestro Señor y estar listos para abrazarle sin ninguna mancha alcanzando rápidamente la santificación perfecta.
2.La Providencia de Dios en que los soldados dividieran la ropa de Jesús y en que echaran suertes por Su túnica.
Después de haberle quitado Sus ropas y Su túnica, los soldados dividieron la ropa de Jesús en cuatro partes. Ellos no cortaron la túnica de Jesús porque esta era “Sin costura, tejida en una sola pieza”; echaron suertes y uno de los soldados terminó quedándose con ella (Juan 19:23-24). Para que la profecía, “Repartieron entre sí mis vestidos, Y sobre mi ropa echaron suertes” (Salmo 22:18) fuera cumplida.
La razón por la cual encontramos una descripción tan detallada de la ropa de Jesús en la Biblia es porque Sus ropas simbolizan la historia de Israel. Primero, la ropa de Jesús – el Hijo de Dios y el rey de Israel – espiritualmente representa la nación de Israel y su gente. Cuando Sus ropas fueron divididas en cuatro piezas, la forma del vestido desapareció y lo único que quedó fueron piezas de tela. Esto significa como Israel iba a ser destruida, perdiendo su posición como una nación soberana, y así como piezas de tela fue lo único que quedó de la ropa de Jesús, esto indica como solamente “la gente de Israel” subsistiría.
Los soldados romanos dividiendo la ropa de Jesús simboliza como la nación de Israel iba a ser destruida por los Romanos, y que separaran la ropa en cuatro piezas significa como la gente de Israel seria dispersada en cuatro direcciones – norte, sur, este y oeste. En Lucas 19: 43-44 encontramos la profecía de Jesús sobre la ciudad de Jerusalén: “Porque vendrán días sobre ti, cuando tus enemigos te rodearán con vallado, y te sitiarán, y por todas partes te estrecharán, y te derribarán a tierra, y a tus hijos dentro de ti, y no dejarán en ti piedra sobre piedra, por cuanto no conociste el tiempo de tu visitación”.
Precisamente de acuerdo a la profecía, en el año 70 D.C., la destrucción completa de la ciudad de Jerusalén fue ocasionada por general Romano Titus. Así como Jesús había dicho “y no dejarán en ti piedra sobre piedra”, Jerusalén fue demolida completamente. Durante el sitio de la ciudad, más de un millón de Judíos fueron masacrados y aquellos que sobrevivieron al sitio y la masacre fueron dispersados en todas direcciones y posteriormente fueron objeto de toda clase de persecuciones por los gentiles.
El evento más terrible que ha sucedido a los Judíos fue la masacre sistemática implementada por el régimen Nazi durante la Segunda Guerra Mundial. más de seis millones fueron ejecutados totalmente desnudos solamente por ser Judíos. Esa inmensa cantidad de gente fueron asesinados como una de las maldiciones porque sus antepasados habían matado a Jesús, quien había venido a este mundo como su rey.
Cuando los Judíos estaban buscando la muerte de Jesús, Poncio Pilato, el gobernador de Roma en la provincial de Judea en ese momento, estaba consiente de la inocencia de Jesús y quiso prevenir sentenciarlo a la muerte. Los Judíos sin embargo, fueron persistentes en pedir la muerte de Jesús, Poncio Pilato les dijo, “Inocente soy yo de la sangre de este justo; allá vosotros” (Mateo 27:24). A esto los Judíos respondieron, “Su sangre sea sobre nosotros, y sobre nuestros hijos” (Mateo 27:25) asegurándose de la ejecución de Jesús, y esto recibió retribución por su demanda, y precisamente de acuerdo a esa demanda, ellos vivieron a través de esa terrible historia. Todo esto fue simbolizado al dividir los soldados Romanos la ropa de Jesús en cuatro partes.
Luego, la túnica de Jesús era “sin costuras” – lo cual significa que el atuendo no había sido unido por costuras – sino que “fue tejido en una sola pieza”. Aquí, la “túnica” se refiere al corazón del hombre. La túnica de Jesús el rey de Israel simboliza el corazón de la posteridad de Israel y muestra su fe en Dios.
El fundador de los Israelitas, el elegido de Dios, es Jacob. Dios personalmente cambió el nombre de Jacob a “Israel” y formó las doce tribus de Israel de los doce hijos de Jacob. Durante mucho tiempo, los Israelitas fueron un pueblo homogéneo, no casándose con hombres o mujeres de otras naciones, y sirvieron al único Dios.
Luego durante el reino de Roboam el hijo de Salomón, una guerra civil en Israel dividió el país en Israel en el norte y Judá en el sur. La gente de Israel en el norte pronto empezaron a casarse con la gente de los otros países y tribus y perdió la integridad de ser una nación homogénea. Solamente la gente de Judá en el sur se convirtieron en los verdaderos descendientes de Israel al permanecer homogéneos en su raza no cansándose con personas no-Israelitas. Por esta razón, los descendientes de Israel son referidos como “la gente de Judá” o Judíos.
Así como la túnica de Jesús estaba “Tejida en una sola pieza”, los Judíos permanecieron por mucho tiempo como un pueblo homogéneo, empezando con su antepasado Jacob. Esta es la razón por la cual los soldados Romanos no rompieron la túnica de Jesús y simboliza espiritualmente cómo el corazón de los Judíos hacia su Dios no puede ser dividido ni destruido por el hombre.
Roma falló en eliminar la fe del pueblo de Israel. Aún después de la caída de Jerusalén y a pesar de las dificultades y del sufrimiento en todas partes del mundo por casi dos milenios, los Judíos no perdieron ni olvidaron su identidad y finalmente el 14 de Mayo de 1948, ellos regresaron a la tierra de sus antepasados y establecieron una nación independiente y soberana.
Así fue cumplida la profecía en Ezequiel 38:8-12. La Escritura nos dice, “al fin de los años vendrás a la tierra recuperada de la espada”. ¿Qué otra raza en la tierra se ha aferrado a su identidad nacional, que ha guardado la seguridad de su fe, y que ha restaurado su condición de estado dos mil años después de la destrucción? El corazón y la fe que el pueblo de Israel heredó de su antepasado Jacob era muy firme, y la preservación de la túnica de Jesús nos predice el desarrollo de tal historia.
Hermanos y hermanas en Cristo, todo lo que está escrito en la Biblia, desde la caída de Jerusalén y el sufrimiento de los Judíos a la destrucción y restauración de Israel, ha sido cumplido. Las cosas que están prontas a suceder son los eventos que están por realizarse en los días venideros, uno de los cuales es el regreso de Nuestro Señor en un futuro cercano para llevarnos al cielo.
Pueda cada uno de ustedes estar alertas cada momento, terminar su preparación como una novia del Señor, y con satisfacción abrazarlo en ese día, ¡Los bendigo en el nombre de Nuestro Señor!
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